Víctor Gaviria es a mi parecer un agudo representante del cine colombiano, con todo como ha sido odiado, venerado y despreciado por la clase conservadora y liberal por considerarlo una
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afrenta al nacionalismo, sin embargo, Víctor Gaviria no celebra el narcopoder, ni el crimen, sino todo lo contrario, denuncia la realidad de violencia y
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pugnas paramilitares de su Colombia.
En el contexto de “
La vendedora de rosas”, Medellín se posicionaba como la ciudad más violenta del mundo, llena de contrastes y plenamente desigual, ciudad bella y fea, festival de flores, metro cable a las alturas.
En “
Sumas y Restas”, los medellinos ambiciosos clasemedieros buscan la fortuna a través del hambre de billetes, contrario a “La vendedora de rosas”, donde los protagonistas, actores no profesionales, son niños que se consuelan con el sacol y hacen fiesta con unos cuantos pesos colombianos. "La vendedora de rosas" no es propia de Colombia, tampoco "Sumas y Restas" que a más del 25% de los hermosillenses (dato manejado por conocedores locales de la cocaína) les parecerá cercano lo que en ella ven.
¿Puede una película definir un nacionalismo? la diferencia entre el caso colombiano y el caso mexicano es sideral si se compara con los clásicos de
Pedro Infante que tanto se discutió como modelo del charrismo en México y que incluso en conversaciones de mesa se proclama como modelo de hombres rudos y mandilones, ingenuos y patéticamente proveedores, que veneran a la madre como ningún otro ser y anteponen el honor ante cualquier cosa.
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La realidad del narcotráfico en México, también ha llegado a lo estrafalario como en Colombia en los años de
Pablo Escobar tal como lo dice
Oscar Escamilla en “Narcoextravagancias”, la sed de sangre y venganza llega a tales grados que madres, esposas, hijos, hijas, abuelos y vecinos pueden llegar a ser aniquilados en medio respiro de la manera más cruenta por causa de hijos pródigos en su mayoría varones que se la rifan como capos o huestes de la mafia. Y sin embargo, el narcotráfico, es funcional y de alto costo para muchos que renuncian a la miseria en un país afligido.
Recomiendo ambas películas. Pronto una entrada dedicada a
Leidy Tabares protagonista de “La Vendedora de Rosas”.
http://www.elcolombiano.com/proyectos/serieselcolombiano/fotos/conflicto_urbano/Memorias/10A6.PDF